Por:Víctor Rodríguez
De nueva cuenta, sintiéndose la dueña del edificio de Presidencia Municipal, la jefa de Comunicación Social del Ayuntamiento, Nora González, el pasado viernes 12 de junio, corrió del recinto público a los compañeros comunicadores, Héctor Maydon (monero del periódico El Bravo), Víctor Villegas (hermano del locutor del grupo Radio Avanzado, Javier) y Dora María Morales (reportera del periódico El Norteño), debido a que la alcaldesa, Norma Leticia Salazar Vázquez no está de humor porque su padre Ramiro perdió las elecciones pasadas.
En ese día primero fue a Héctor Maydon junto con su compañero Víctor Villegas, que se según fuentes, fueron agredidos verbalmente con palabras altisonantes por parte de la jefa de prensa del municipio, debido a que hace algunos días el monero en su página oficial “El Fusil” publicó su dibujo de la presidenta municipal con cuernitos en la cabeza y una cola de diablo y atrás un bote de basura con el logo de la polémica M y dentro de ella una tortuga ninja con antifaz de color azul y con la leyenda: “la instrucción que tengo de Dios es seguirte apoyando, aunque no hayas votado por mi papito” (sic).
Y a la periodista Dora María Morales fue porque según no apoyó con notas periodísticas a la campaña del ex candidato del Partido Acción Nacional a la diputación federal por el cuarto distrito y padre de la primera edil, Ramiro Salazar Vázquez.
Esto es prueba de que Nora González otra vez está violando el artículo 7 de la constitución política de los estado unidos mexicanos, el cual dice: “Es inviolable la libertad de difundir opiniones, información e ideas, a través de cualquier medio, no se puede restringir este derecho por vías o medios indirectos, tales como el abuso de controles oficiales o particulares, de papel para periódicos, de frecuencias electrónicas o de enseres y aparatos usados en la difusión de información o por cualesquiera otros medios y tecnologías de la información y comunicación encaminados a impedir la transmisión y circulación de ideas y opiniones” (sic).
“Ninguna ley ni AUTORIDAD puede establecer la previa censura, ni coartar la libertad de difusión, que no tiene más limite que los previstos en el primer párrafo del artículo 6 de esta constitución, en ningún caso podrán secuestrarse los bienes utilizados para la difusión de información, opiniones e ideas, como instrumento del delito (reformado mediante decreto publicado en el diario oficial de la federación el 11 de julio del 2013)” (sic).
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