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Ecos del primero de julio.
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El cinismo el único atributo de ASG.
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A manera de respuesta.
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Observado.
Por José de la Paz Bermúdez Valdés
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Ecos
del primero de julio.
Concluyó
la jornada electoral. Sólo falta la calificación de la elección por el Tribunal
Federal Electoral (TRIFE) para finiquitar el proceso eleccionario. A nadie sorprenderá la dirección y conclusión
de dicho dictamen: Enrique Peña Nieto será confirmado como ganador del proceso
electoral 2012.
No, no
era nuestro candidato, pero tampoco la ofuscación llega a los linderos de negar
o reconocer el triunfo. Las denuncias presentadas por quien jamás reconocerá
sus derrotas, son sólo artilugios de negociación, lamentablemente quienes
apasionadamente entregan sus vidas en aras de mentiras sofisticadas, no
alcanzan a vislumbrar que tan sólo son utilizados para intereses tan aviesos
como los que dicen denunciar.
El
argumento de venta y compra de votos no es nuevo, de hecho ha sido practicado
por todos los partidos políticos, esgrimirlo ahora, tan sólo constituye una
muestra patética de impotencia y ausencia de capacidad para plantear las
verdaderas cuestiones que como sociedad nos afectan.
La
existencia de un organismo arbitro en el proceso: el IFE, que gasta millonarias
cantidades en la realización del evento, en un país pobre, constituyen el
primer elemento a combatir. Urge disminuir las exorbitantes cantidades que
gasta este organismo.
La
asignación de fondos públicos, es decir de nosotros los contribuyentes, para el
funcionamiento de los partidos políticos, en la realización de campañas, que
permite el enriquecimiento de quienes
tienen el monopolio de las candidaturas, no es un asunto menor, es importante que se termine
con ello.
Los
partidos deben costear sus propios gastos con las contribuciones que sus
militantes hagan, sólo así evitará el dispendio del dinero de los
contribuyentes, además sólo así demostrarán la existencia real de su
militancia. No más prebendas a los eternos vividores presupuestales.
Las
campañas deben ser solventadas con cargo a esos militantes y los propios
candidatos, no con cargo al erario público, de esa manera los propietarios del
Movimiento Ciudadano, antes Convergencia, dejaría de ser patrimonio personal de
Alberto Anaya, El Verde Ecologista, propiedad de los González, Nueva Alianza de
Elba Esther Gordillo y los otros, botín de una clase política vividora y
parásita.
Gastan
millonadas de dinero ofreciendo en cada campaña, gorras, vasos, platos,
banderines, camisetas, llaveros, en fin una pléyade de artículos diseñados
exprofeso con cargo al presupuesto asignado por el organismo dizque regulador,
que en realidad es dinero de los paga impuestos.
En esa
dirección debe canalizarse la indignación, el repudio al proceso electoral
derrochador, debe dirigirse a una desaprobación por la forma soez y grotesca
como se gasta el dinero del pueblo, en una acción que presuntamente habría de
beneficiar a la ciudadanía. Primero somos despojados de lo poco que tenemos,
para después ayudarnos a salir de la crisis.
Eso es
lo que debe combatirse, el despilfarro, lo costoso de la campañas a los
contribuyentes. Un ejemplo claro de lo que no hacen los países ricos, lo
observamos en los vecinos del norte (EUA), los partidos recaudan fondos para su
sostenimiento, realizan actividades de recolección de fondos, los candidatos
con sus recursos o los de sus amigos y simpatizantes financian sus campañas, ni
un solo centavo sale del erario público.
Y eso que es el país más rico del mundo. No dilapida el dinero de los
contribuyentes.
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El
cinismo el único atributo de ASG.
Una
muestra clara de la ineptitud, de la incapacidad para hacer frente a los
múltiples problemas que aquejan al municipio de Matamoros, la apreciamos día
con día en el “mayor de la ciudad” Alfonso Sánchez Garza.
Un
sujeto que aparte de incapaz para desempeñar la función encomendada, es cínico.
Diariamente el periódico de mayor circulación en la ciudad publica fotografías
del desastre en que está convertida la otora pujante ciudad de Matamoros.
Y es
que el supuesto ingeniero ¿compraría el título? Es incapaz de proyectar, mucho
menos realizar alguna obra que aligere la serie de problemas de la ciudad.
Las
calles llenas de baches, pozos, topes, sin cordones, ausentes de banquetas,
carentes de pavimento, sin señalamiento vial, verdaderos muladares, por donde
la ciudadanía transita, con un congestionamiento vial desmesurado y una
ausencia de autoridades que atiendan las denuncias de la población.
Con la
infraestructura colapsada, con una ausencia de autoridad, estamos ante una
administración pública fallida, donde la existencia de un palacio municipal es
simbólica, el cuerpo edilicio una carga a la población.
¡Ah!
Pero que no se trate de salir en la foto, el “mayor de la ciudad” está presto,
como suelen decir en nuestra campiña, para el fandango se pinta solo.
Que
triste espectáculo ofrece Alfonso Sánchez Garza, la de un sujeto mediocre, incapaz
e inepto. Sólo sabe llorar, porque Eric Silva Santos se robó el dinero de los
contribuyentes, pero no hace nada para remediar esa situación, desastroso el
papel que representa el dizque presidente municipal. Pasará a la historia como
el peor gobernante que ha pisado la presidencia municipal de Matamoros.
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A
manera de respuesta.
En
atención a los múltiples correos electrónicos que hemos recibido y que en
esencia se refieren a nuestra posición con respecto al proceso electoral 2012,
en donde señalamos con propiedad la ausencia de calidad por parte del mitómano
de André Manuel López Obrador, resumimos nuestra posición en los siguientes
considerandos.
Si, es
verdad que durante mucho tiempo participamos en lo que durante el priato se
denominó oposición. Lo hicimos convencidos de la necesidad de un cambio en la
participación política, de una modificación a las reglas del juego, las cuales
eran siempre a favor del partido gobernante, de la existencia de instrumentos
que hicieran posible la equidad electoral.
En ese
sentido, luchamos por la existencia de una credencial con fotografía, de que
las boletas electorales se foliaran, del uso de la tinta indeleble, de la
ciudadanización de los organismos electorales, ya que en ese tiempo el gobierno
tenía el monopolio de éstos y designaba, desde el presidente de la Comisión Federal
Electoral hasta los escrutadores en las casillas.
Fueron
luchas sostenidas en los diversos municipios del país. Más de una ocasión
fuimos derrotados por la maquinaria estatal, pero jamás recurrimos a llorar
nuestros contratiempos, fuimos despojados de triunfo legítimos y jamás asumimos
conductas como las que hoy ofrece ese individuo megalómano y poco hombre que es
André Manuel López Obrador.
A lo
largo de Tamaulipas se dieron batallas históricas Carlos Enrique Cantú Rosas en
Nuevo Laredo, Jesús Miguel Treviño Rábago y Baltazar Díaz Bazán en Reynosa,
Edilio Hinojosa en Río Bravo, Vidal Blanco en Valle Hermoso, Enrique Siller
Flores, Jorge Cárdenas, Sonia Martínez de Villar y un servidor en Matamoros,
Jaime Hernández en San Fernando, Reyes Fuentes en el Mante, Fernando San Pedro
en Tampico, en fin en muchos municipios de la geografía estatal.
Sufrimos
despojos, encarcelamientos, ataques personales, demandas injustificadas y
pésimamente procesadas, pero jamás nos rendimos. Ganamos con votos y con votos
hicimos reconocer nuestros triunfos, jamás argumentamos que habíamos ganado y
no lo pudimos probar.
Fuimos
oposición a las condiciones políticas imperantes, pero jamás fuimos
intolerantes o irracionales. No obstante que no fuimos vencidos honradamente,
dejamos que los responsables de los atracos electorales se indigestaran, el
tiempo nos dio la razón. No el ansia de que se reconocieran nuestros triunfos
en donde no los obtuvimos.
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Observado.
El gobierno del estado de Tamaulipas ya hizo hasta lo imposible para
recaudar fondos, aun de la ilegalidad. Ahora qué? ¿Cuándo invertirán lo cobrado
a los propietarios de vehículos por el supuesto rezago en los impuestos
vehiculares?
La
obra pública no se ve por ningún lado.
¿Serán tan eficientes como dicen? ¿Invertirán el dinero recaudado?
¿Para qué tanto escándalo con la publicación de la Ley de Víctimas, si quien más
lesiona a la ciudadanía son los gobiernos estatales y municipales? ¿Pagarán los
daños?
¿Quién pagará a los conductores por los desperfectos sufridos en sus
vehículos a consecuencia dl mal estado de las calles? ¿Dónde está el jefe de la
oficina fiscal en Matamoros, para urgir al gobierno a que solucione este
problema?
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