Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Cuando los niños y
jóvenes concluyen su misión en cada etapa escolar por méritos propios, -a pesar
de las dificultades y los retos- les queda la alegría del deber cumplido. Y
claro, todo deber ser alegría, parabienes, fiesta, celebraciones y abrazos y
bendiciones para los padres que se esforzaron junto al hijo, y ¡zaz¡ le cae una
mosca al pastel y empiezan los asegunes.
Yolatl es una joven de 18 años, la conocí cuando era
pequeñita, una niña esforzada, diferente, junta ella sus padres que siempre siempre, la llevaron y
trajeron de un sitio al otro, ahí donde se les decía, ellos no desmayaban y
acudían con su pequeña.
Los años pasaron y hace tres o cuatro días Yolotl me
sorprendió, pues concluyó la preparatoria y vi con detenimiento las
fotografías con su familia, todos
contentos y muy felices y digo me sorprendió porque además de guapa ha sido
excelente alumna.
La prepa Juan José de la Garza en Matamoros es sabido
por todos, es de ésas escuelas publicas que de pronto, quien sabe por qué, se
creyeron “privadas”, directores y profesores de la institución la hicieron su
coto, cambiaron la enseñanza, la docencia por otros fines, quien sabe cuáles.
Por si fuese poco, en vez de sentirse orgullos de la
generación de alumnos que egresó este año, no les pudo caber en la cabeza que
una jovencita como Yolatl concluyera con excelentes calificaciones su educación
media superior y claro, no faltó quién sintiéndose agredido, le metió el pie.
No, no es que se pida o suplique por una evaluación
positiva sin mérito de Yolotl al contrario, precisamente porque es una joven
estudiosa y porque no puede ser creíble que teniendo diez en filosofía, la
profesora Norma Ramírez Rodríguez le haya colocado una calificación negativa en
ciencias de la salud.
Hoy en día es complicado que un joven con carencias
económicas, físicas y de cualesquier otra índole concluya sus estudios, no de
prepa, sino hasta de secundaria. Pregunto a la Secretaría de
Educación, porque estamos en terrenos de la discriminación contra
Yolotl,-¿Quién certifica que la profesora Ramírez Rodríguez esté capacitada
para evaluar correctamente a una joven con autismo que pasa con diez la materia
de filosofía?
Alguien puede decirle a profesor Juan Guerrero
Saucedo que está obligado a darles audiencia a los padres de Yolotl, que debe
dar la cara y explicarles porqué le permite a su compañera Ramírez Rodríguez
que descalifique y demerite el esfuerzo de Yolotl.
Y claro también deben decirle que ya deje de
escudarse en los reporteros cuando afirma; “me vale, a mi me protegen los medios de
comunicación”, dice muy recio, ni qué fuera el secretario Diódoro Guerra
Rodríguez.
No sólo la Secretaría de Educación de Tamaulipas, sino la Secretaría de Educación
del gobierno federal, está cuestionada, pues a Yolotl se le truncan sus sueños,
sueños que hasta hoy ha hecho realidad pues a pesar del diagnostico de autismo,
ha sido una niña tenaz con capacidad
intelectual para aprobar cinco exámenes en la única universidad que le abrió la
puerta, pues en cinco no quisieron recibirla, incluida la UAT , lo cual resulta una
verdadera pena.
Yolatl Cruz Jaramillo podrá haber reprobado Ciencias de la Salud , pero el resto de sus
materias las aprobó con 8, 9 y diez. De
hecho Yolotl es de ésos seres humanos triunfadores a pesar de los obstáculos
que la vida y algunos neófitos insisten
en ponerle.
Sé que no quedará impune la discriminación contra
Yolotl, pero sería bueno que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, el
Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación , se echaran un clavado en las
escuelas públicas y privadas respecto al trato que se les da a los niños y
jóvenes con capacidades diferentes.
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