Lic. Luis
Gerardo González Álvarez
LA GRAN PUERTA
DE MÉXICO
MATAMOROS
Hola que tal ambles lectores del Periódico Frontera un monumento al que
no podríamos dejar pasar desapercibido en esta recopilación, es la expresión cultural artística y emblemática en
nuestra ciudad, a la que se le ha titulado “La Gran Puerta De México” y esta
obra estuvo a cargo del escultor Sebastián. Al que se le considera uno de los
de mayor presencia y reconocimiento en el mundo.
Matamoros es considerada la ciudad heroica
puntal del norte de Tamaulipas y crisol de la nación mexicana. Puerta abierta
al mundo a partir de la consumación de la independencia, y recordemos todo el
proceso con la presencia de nuestro cruce fronterizo en el intercambio diario
de comercio exterior al funcionar en este punto como un puerto de altura.
El Puerto del Refugio es sin duda el punto
de partida a lo que hoy somos considerados como una ciudad pujante y en pleno
desarrollo del siglo XXI, el desarrollo de los años 50s con el algodón,
posteriormente con la industria maquiladora;
hoy seguimos siendo puntal para el intercambio comercial entre dos
naciones y por ende seremos por siempre “La Gran Puerta De México”.
Fue el 31 de octubre del año 2006 en donde
el H. Cabildo llevó a cabo en la Vigésima Séptima Sesión Ordinaria, en la que
por acuerdo se declara a esta escultura monumental con el nombre de “La Gran
Puerta De México”, para que esta sea considerada como un símbolo de identidad y
patrimonio cultural de Matamoros; queda definida la ubicación de este
monumento, donde se aprueba destinar un área de la explanada del Parque
Olímpico, Cultura y Conocimiento, para que sea en este lugar el punto de
exhibición permanente de esta magna obra.
SEBASTIÁN NOS INTERPRETA SU OBRA
Dispuestas
en un virtual plano estelar cósmico se destacan dos pares de estrellas
contrapuestas y en proporciones simétricas. Como una marca sideral, dibujan el
patrón a partir del cual se despliegan cerca de una veintena de líneas que se
fugan hacia el espacio como si se tratase de haces de luz, delimitado y
definiendo dos poderosas columnas estriadas.
Coronando
cada uno de estos atlánticos pilares se desenvuelve una forma que gira en el
espacio topológico, haciendo viajar a las estrellas encontradas y, generando un
juego de curvas, las redirige girando cada cual hacia su gemela antagónica para
así abrazarse sin tocarse, quedando frente a frente a modo de dos grandes manos
contenedoras de la transformación que las originó.
En
medio de este colosal abrazo estriado, encontramos una figura estructural; el
cubo como generador de la esencia y como representante del espacio
tridimensional pero a la vez multidimensional en sus ejes y planos de simetría.
Un cubo que representa en su intrínseca solidez la capacidad económica y
cultural de México que requiere de dinamismo y fuerza para su transformación.
La
ciudad de Matamoros se convierte en el detonador de esta transformación siendo
una puerta obligada de México al mundo comercial y cultural del norte de
nuestro país.
Sutilmente,
la silueta interior de la Gran Puerta de México dibuja a contraluz una alargada
y gigantesca “M”, letra inicial que comparten en su nombre México y Matamoros y
monumentalidad, formando el dintel de paso para la entrada y salida del
territorio Mexicano.
LA OBRA DE SEBASTIAN
Dentro
del lenguaje geométrico de nuestros días, Sebastián es uno de los escultores
con más presencia y reconocimiento en el mundo. Originario de México y dentro
de México del estado norteño de Chihuahua, Sebastián (cuyo nombre de pila es
Enrique Carbajal) nació en el año de 1947.
De
vocación constructiva, a sus cincuenta y cuatro años ha creado una obra
monumental urbana distintiva que se encuentra en sitios tan variados del orbe
como, Estado Unidos de Norteamérica, Japón, Canadá, Egipto, Portugal, Islandia,
Brasil, Argentina, Colombia, etc. Y por supuesto, México. Habiendo realizado
sus estudios en la Academia de San Carlos, en 1970 Sebastián formó parte del
salón independiente. Desde los inicios de su carrera Sebastián ha montado mas
de 160 exposiciones individuales en todo el mundo en 1976 conquistó el sitio
deseado por los artistas nacionales con una exposición titulada “El cubo” en el
Museo de Arte Moderno y en 1986 la sala nacional en el museo del Palacio de
Bellas Artes con la exposición “Geometría orgánica” en la ciudad de México. En
1978 colocó su primera escultura monumental urbana en el extranjero, “Trono de
Netzahualcóyotl”, en Vancouver, Canadá. Desde entonces ha participado en
múltiples bienales de pintura, escultura y grabado, en viarias de las cuales su
obra ha obtenido primeros premios en diversas naciones del continente Asiático,
Europeo y Americano.
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En
1983 se constituyó en el primer mexicano que fue nombrado Miembro Honorario de
la Real Academia de las Artes Visuales de La Haya y la reina de Holanda le
entregó el reconocimiento. Es miembro de la Academia de Artes de México y su
obra es tan diversa que abarca tanto obra monumental urbana, esculturas de
pequeño formato, transformables, como pintura y una vasta obra gráfica
comprendiendo grabado, litografía, serigrafía, mixografía, etc. Ha diseñado
joyería, muebles, trofeos y medallas. En México sus esculturas monumentales más
notables son “La Puerta de Monterrey”, “El Caballito”, “La Puerta de Chihuahua”
, “La Flor del Desarrollo de Cancún” y la “La Puerta del Camino Real de
Colima”, entre otras. En el extranjero las más relevantes de su producción son
“La Puerta de la Amistad” en Montreal, “Arco Fénix”, “Tsuru”, que se levantan
en enormes y representativos espacios abiertos de las ciudades japonesas de
Kadoma y Sakai. Así como la obra “Migración”, en los Jardines Imperiales de
Tokio (en Chiyoda).
En
1994 fue distinguido por el Gobierno de Egipto como invitado de honor de la
bienal de El Cairo. En 1999 expone sus obras monumentales en la Cd. Luz, siendo
entonces galardonado con La Medalla de la Ville de París por el alcalde de la
capital francesa.
Actualmente
se construyen sus obras “Los Arcos de Guadalajara” en la ciudad del mismo
nombre, el complejo urbano Bosque Real en la Ciudad de México (primer museo al
aire libre de obras urbanas monumentales de su autoría), “Excelsitud” en la
universidad de Kansai en Osaka.
Hoy
nuestros símbolos de identidad muestran al mundo que Matamoros, es sin duda la
ciudad que lucha por su desarrollo y crecimiento, siendo puntal para el
intercambio comercial entre dos naciones La Gran Puerta De México.
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