-¿Era Biasi?
-¿Y el militar al mando?
-¿Novela de Cabeza de Vaca?
-No “hayan la puerta” Gustavo y Pepe Elías
UN par de
supuestos o reales hechos, que inciden de manera directa en la política, y
situaciones de alto riesgo en dos municipios tamaulipecos, fueron los eventos
más relevantes que se suscitaron la semana pasada en la esquina noreste del
país.
En efecto, la
presunción de que el Secretario de Desarrollo Social del Municipio, LUIS
ALFREDO BIASI, portara un chaleco antibalas propiedad de la Marina Armada
Asimismo, los
enfrentamientos de grupos armados y de éstos en contra de las fuerzas federales
en el puerto de Tampico y en la petrolera ciudad fronteriza han salpicado
políticamente a los alcaldes de ambos municipios y, por supuesto, al mandatario
estatal.
Pero, vayamos por
partes.
Al edil con
licencia y quien se encarga de la política social en la actual ayuntamiento que
preside LETICIA SALAZAR VAZQUEZ le ha llovido sobre mojado, luego de que un
paparazzi local captó a una persona encapuchada y portando un chaleco con las
siglas de la Marina
con ciertas características físicas y vestuario que hacen presumir que en
realidad se trata del citado funcionario municipal y aspirante a la candidatura
del PAN a la diputación federal en 2,015.
Lógicamente, BIASI
niega los cargos y asegura que la persona que aparece en la gráfica captada
durante el operativo, definitivamente no es él.
No obstante, sus
enemigos políticos afirman lo contrario y, en consecuencia, han enderezado una
campaña mediática en su contra, recalcando que dada su responsabilidad oficial
nada tiene que andar haciendo en ese tipo de acciones y menos portando equipo
de una institución armada.
Al respecto, vale la pena señalar que es
objetiva la apreciación del regidor del Partido Nueva Alianza ULISES RUIZ PEREZ
al opinar que en caso de que realmente se tratara de LUIS ALFREDO BIASI, mayor
responsabilidad tendría el oficial militar que proporcionó y permitió el uso
del chaleco antibalas propiedad de la Marina
Armada
Otro incidente que
alborotó a la gallera política cueruda es, sin duda, el supuesto o real intento
de secuestro por parte de un grupo armado, allá en ciudad Reynosa, del
legislador en la Cámara Alta.
Lo que hace dudar
del dicho de CABEZA DE VACA es que es de sobra conocido que los grupos
delictivos no se movilizan en una sola unidad, y menos cuando tienen una misión
en específico.
De acuerdo a su
versión, la pericia de su chofer y el blindaje de su camioneta oficial
permitieron eludir el intento de secuestro.
Dada su investidura
y ventajas en la máxima tribuna mexicana, FRANCISCO JAVIER atizó fuerte a los
gobiernos estatal y federal, lo mismo ante distintos medios de comunicación que
en el Senado de la
República.
Sobra decir que
ambos incidentes han sido utilizados por los grupos políticos en pugna para
llevar agua a sus respectivos molinos.
Los que están
pasando por momentos difíciles en sus trienios son los alcaldes de puerto
Tampico y ciudad Reynosa. GUSTAVO TORRES SALINAS y JOSE ELIAS LEAL
prácticamente no hayan la forma de salir del atolladero ante las situaciones de
riesgo que se han presentado en sus ínsulas.
El reacomodo de
los grupos delictivos que operan en ambas pobladas ciudades tamaulipecas está
afectando a sus gobiernos y, obviamente, a los habitantes de ambas comunidades.
Medios de
comunicación con presencia nacional e internacional, así como las redes
sociales han dado cuenta puntualmente de los lamentables hechos de violencia.
La onda expansiva
también ha alcanzado la esfera gubernamental estatal, tal y como lo evidenció
en sus columnas periodísticas el comunicador CARLOS LORET DE MOLA y que provocó
la natural reacción en los medios locales.
Sin embargo, como
dice el dicho y dice bien, palo dado ni Dios lo quita.
Ni hablar.
Y hasta la próxima.
mariodiaz27@prodigy.net.mx
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