EN el VIII Distrito Electoral Federal con
cabecera en esta ciudad fronteriza, el alto mando priísta en la entidad se
encuentra en delicada encrucijada en lo que a la selección del candidato se
refiere.
Una buena carta a jugar es, sin duda, el
todavía flamante delegado del Instituto Tamaulipeco de Vivienda y Urbanización
(ITAVU), DANIEL SAMPAYO SANCHEZ.
El problema se circunscribe a que si
exdiputado en la pasada legislatura sería el abanderado para tratar de
recuperar la curul federal que está en manos de CARLOS ALBERTO GARCIA GONZALEZ
o, bien,
si se le lanza al redondel en
el proceso eleccionario local de 2,016.
A toro pasado y con ánimo de corregir el
entuerto, el PRI estatal que comanda RAFAEL GONZALEZ BENAVIDES analiza las
encuestas que el propio partido en el poder realizó en el primer trimestre del
año pasado.
En ese entonces, SAMPAYO SANCHEZ era el
precandidato mejor posicionado en el ánimo de los electores, e, incluso, los
fríos números revelaban que se ubicaba solo dos puntos debajo de le preferencia
de la entonces candidata del PAN a la presidencia municipal, LETICIA SALAZAR
VAZQUEZ.
“Haiga sido, como haiga sido”, como dijo
aquél, la decisión final favoreció al ingeniero SALVADOR TREVIÑO GARZA para
competir por la alcaldía. La historia final es hartamente conocida, luego
del sonoro revés electoral
que el panismo local impuso a la causa tricolor.
Ante la imperiosa necesidad de recobrar las
posiciones perdidas en San Lázaro, con todo y lo complicado de las
circunstancias políticas en la esquina noreste tamaulipeca, el PRI duda en
lanzar en 2,015 a SAMPAYO SANCHEZ o, bien, cuidarlo para el relevo de los
poderes constitucionales en Tamaulipas en 2,016.
El
potencial enemigo político que representa el secretario de Desarrollo Social
Municipal, LUIS ALFREDO BIASI, prácticamente hace dudar al alto mando estatal
tricolor del triunfo al término de la jornada dominical electoral del primer
domingo de junio del año próximo.
Exponerlo a una derrota, que sería la
tercera para el PRI en forma consecutiva, impactaría de lleno su capital
político y
pondría en grave riesgo la
aventura que representa la recuperación de Matamoros.
Por supuesto que, llegado el momento de la
designación de los abanderados a la diputación federal y a la alcaldía, podrían
surgir otros aspirantes con posibilidades de competir y triunfar. Sin embargo,
el resultado que arrojó la propia encuesta tricolor en primer trimestre del año
pasado, necesariamente obliga a voltear hacia la delegación del ITAVU en
Matamoros.
Obviamente, ambos procesos que se avecinan
requerirán de un gran esfuerzo priísta, lo mismo en la selección del candidato
idóneo, que en los recursos económicos que obliga una campaña mediática de
altura y con resultados.
De entrada, para el 2,015, ya anda en plena
campaña proselitista el próspero empresario aduanal LUIS ALFREDO
BIASI, mientras que para la
justa electoral de 2,016, se prepara el diputado federal CARLOS ALBERTO GARCIA
GONZALEZ.
Sobra decir que para los agudos
observadores políticos no pasa desapercibido que el nombramiento de DANIEL SAMPAYO
como delegado del ITAVU representa una franca señal de placeo político.
Y hasta la próxima.
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