VORAZ
ALCALDE RENÉ LARA AZOTA A TULA
Por Ambrosio Garza D.
Tula Tam.***Cualquiera que llega al municipio de
Tula piensa que realizó un viaje al siglo pasado, pues abundan las calles sin
pavimentar, las letrinas y las penumbras al caer la noche
El municipio de Tula presenta un atraso de
por lo menos 20 años. Carentes de infraestructura básica, servicios públicos
eficientes, seguridad y obra pública, el Ayuntamiento es visto nomás como botín
por todos los políticos que han pasado por el cargo de alcalde.

La población de Tula ya no tolera este tipo
de miserables pillos perfumados que siguen tercos que querer meterles en la
boca la cuchara vacía a los toltecas.
Cualquiera que llega al municipio de Tula
piensa que realizó un viaje al siglo pasado, pues abundan las calles sin
pavimentar, las letrinas y las penumbras al caer la noche. Además la gente
todavía acostumbra a darse barridas con huevo de patio y albahaca porque no
conoce a los médicos.
De nada ha servido para los habitantes de
Tula que el municipio sea considerado “Pueblo Mágico”, cuando los magos han
sido los alcaldes que han desaparecido la lana pública para aparecerla en sus
bolsillos.
En Tula se comenta que quienes han llegado
a la alcaldía demostraban en sus ojos el hambre y la sed que los carcomía desde
la infancia y que en menos de tres años su vida cambiaba para bien, pues se
volvían inmensamente ricos, contrario al resto de la población que seguían en
el atraso.
El enorme problema que padece el municipio
de Tula es permitir que el PRI les imponga a miserables ladrones como alcaldes,
que nomás llegan a la
Presidencia Municipal , como es el caso de René Lara Cisneros
que en 22 meses de mala administración no ha cumplido sus promesas de campaña y
tampoco se le ven ganas de que quiera hacerlo, sumido como está en la voraz
robadera, pues quiere irse multimillonario al dejar el cargo para no tener la
necesidad de trabajar…
Ahora que las remesas de quienes se fueron
al “otro lado” se han disminuido es cuando empieza a calar más el hambre entre
la población y poniendo en evidencia el nulo trabajo de René Lara Cisneros, ya
que cuando las remesas llegaban puntuales y “con carnita” la población ni
cuenta se daba del saqueo que les hacían y ahora que el billete verde ya no
llega como antes, las cosas se ponen en su justa dimensión demostrándose la
pobre calidad moral de René Lara Cisneros quien no tiene vergüenza ni temor de
robar al pueblo de Tula
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