H, Matamoros, Tamaulipas:

Saludando con sombrero ajeno.



Tangente

Por Oscar Díaz Salazar

“La gira del saludo con sombrero ajeno” es cómo podemos llamar a la visita de Doctor que efectuó el Ing. Egidio Torre Cantú al municipio de Reynosa, el pasado viernes 10 de agosto.

Si revisamos la reseña de las actividades del gobernador tamaulipeco en su paseo por Reynosa, encontraremos que en la mayoría de la media docena de eventos que presidió en el municipio fronterizo, fue convocado por mero protocolo, por simple cordialidad institucional, para “vestir” las ceremonias que se prepararon para inaugurar obras en las que no existió la participación o el recurso de la administración estatal.

La colocación de la primera piedra del Centro de Convivencia Familiar del Poder Judicial del Estado, es una muestra de la subordinación del poder judicial de Tamaulipas respecto al Ejecutivo.  La obra, que por cierto no queda claro para quien se construye o quien podrá hacer uso de esas instalaciones, es un indicador de las prioridades que tiene el Gobernador en relación al poder judicial. Me pregunto si el mandatario estatal conoce sobre el proyecto para construir un edificio del poder judicial aledaño al penal de Reynosa, para garantizar la seguridad de la población, los custodios y los procesados que en la actualidad requieren ser trasladados hasta el centro de la ciudad para rendir declaraciones.

El Gobernador Torre Cantú encabezó el acto para inaugurar el parque lineal “Anzalduas”.  “Parques lineales”, es el eufemismo utilizado para llamar parque a lo que es simplemente la acera de un bulevar, y para “burlar” e incumplir las reglas de operación del programa de rescate de espacios públicos urbanos de la Sedesol federal. La obra inaugurada por el Ejecutivo estatal se pagó con recursos federales y municipales.

En cuanto a las obras de expansión de la empresa maquiladora “Cequent Electrical Product de México”, no necesito darles muchas explicaciones para convencerlos de que los inversionistas extranjeros, en este caso norteamericanos, que instalan, operan y expanden factorías en nuestro Estado, si invierten no es gracias a las gestiones de las autoridades, sino a pesar de lo que hacen o no hacen las oficinas locales encargadas de la promoción industrial. Obvio que en la expansión de esta maquiladora la inversión es cien por ciento privada.

En lo que se refiere a la inauguración de las obras de ampliación de la carretera Reynosa – Matamoros, en un tramo que ya quedó dentro de la mancha urbana de Reynosa, habría que precisar que en esta obra ejecutada a paso de tortuga, se aplican recursos que en su mayoría los provee Petróleos Mexicanos.

Quizás - no tengo el dato para afirmar o negar - probablemente el único evento en el que Egidio Torre no saludó con sombrero ajeno es en la inauguración del parque de barrio de la colonia “Villa Florida”. Fuera de esta obra, que sospecho es también una más del programa de parques de la Sedesol federal, al Gobernador de Tamaulipas lo trajeron en calidad de edecán o de maestro de ceremonias, solo para adornar el evento.

Transcurridos  dos años de haber asumido el cargo, ya pasó tiempo suficiente como para que el Gobernador estuviera “haciendo un solito”, “hubiera hecho la cruz”, nos hubiera regalado, a los reynosenses, una primera obra de verse, una inversión importante, a la altura del municipio más poblado de Tamaulipas.
Compartir en Google Plus

Editores periodico frontera

0 comentarios: