PALACIO JUEVES 12 DE JULIO…….
Por: Mario Diaz
COMO debe ser, sin tapujos ni demagogia, el
gobernador del estado EGIDIO TORRE CANTU reconoció el mensaje que los
tamaulipecos enviaron a través de su voto durante el pasado proceso electoral
federal.
También, fue claro y enfático al manifestar
que “lo que se tenga que corregir, se corregirá” en clara alusión a que, en los
días por venir, habrán de registrarse cambios de estrategias y rumbos, en todos
los sentidos.
TORRE CANTU, en su carácter de primer
priísta de la entidad, se dirigió así a los integrantes del Consejo Político
Estatal del PRI reunidos, la tarde de antier, en el Polyforum de ciudad
Victoria.
El Jefe del Ejecutivo recordó que su
partido tiene una encomienda de vital importancia el año próximo, con el relevo
de los ayuntamientos y diputaciones locales.
Al respecto, fue muy directo al expresar
que “somos un Partido que entiende, que aprende y que se renueva”, al
referirse, obviamente, a la debacle tricolor el domingo 1 de julio.
Exhortó a los priístas reunidos a mantener
la unidad y refrendar con trabajo y compromisos el respaldo popular que en
otras elecciones locales han brindado los electores.
Llamó la atención y causó grata impresión
la sinceridad del mandatario estatal al reconocer que a pesar de que su
gobierno ha trabajado con todo su empeño, disciplina y dedicación, queda claro
que los ciudadanos tamaulipecos piden un mayor esfuerzo.
Lo dicho, tan simple que es reconocer
errores y aprender de los mismos y no buscar pretextos ni culpables para
justificar los yerros. Es evidente que una vez pasado el tsunami electoral,
EGIDIO TORRE CANTU se ha topado con la cruda realidad que derivó en la peor
derrota del PRI en el territorio tamaulipeco. Y, lo más importante, actuará en
consecuencia.
De todo lo anterior, muy bien podría
interpretarse que al regreso del período vacacional veraniego, gabinete y
partido resentirán el efecto torrista. Quienes fallaron a la confianza
depositada y le apostaron al escamoteo de los recursos económicos partidistas,
así como aquellos que prefirieron el futurismo personal nacional antes que la
encomienda de apoyo a los candidatos tricolores a las diputaciones federales,
muy seguramente habrán de pagar las correspondientes facturas.
Del mismo modo, aquellos que echaron las
campanas al vuelo, subestimando al rival político y engañando a quien manda en
Tamaulipas no gozarán a plenitud el receso veraniego.
En contraparte, asumiendo una postura
diametralmente opuesta a la de su jefe político, quien tuviera a su cargo la
coordinación o descoordinación-según el cristal con que se mire-de las campañas
políticas en Tamaulipas, RAUL CESAR GONZALEZ GARCIA, responsabiliza al
Instituto Federal Electoral del fracaso tricolor.
Quien buscaba integrarse al equipo del
presidente electo ENRIQUE PEÑA NIETO no tiene empacho al asegurar que los
electores tamaulipecos fueron confundidos por la autoridad electoral acerca de
la forma de votar con la alianza PRI-Verde Ecologista.
Lejos de reconocer su falta de capacidad en esos menesteres y la
búsqueda de reflectores nacionales, GONZALEZ GARCIA no acepta ni su inmadurez
ni la irresponsabilidad mostrada a lo largo de los 90 días de proselitismo
electoral federal en Tamaulipas.
Cuestión de analizar cómo el fenómeno de
nulidad no se presentó en otras entidades federativas en donde el PRI arrasó
con sus contrincantes sin que los electores provocaran la anulación de su voto.
Además, en base a las marrullerías
eleccionarias ¿realmente quienes marcaron los emblemas del PRI y el Verde
Ecologista en el caso de diputaciones y senadurías lo hicieron por
desconocimiento? O ¿será acaso que lo hicieron deliberadamente por
inconformidad o conveniencia?
En lo único que no queda duda es que, muy
seguramente, no prosperará la impugnación priísta ante el Tribunal Electoral
del Poder Judicial de la
Federación argumentando la “intencionalidad del voto” en los
sufragios anulados. Al respecto, el Código Federal para Institutos y Procesos
Electorales (COFIPE) es más que
claro en lo que se refiere a boletas marcadas en dos emblemas distintos.
Así de sencillo.
Por otro lado, mal se ve el PRI estatal al
pretender ganar en la mesa lo que no pudo obtener en las urnas.
Aunque claro está, el derecho del pataleo no
se le niega a nadie.
Ni hablar.
Y hasta la próxima.
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