POR:ROCÍO SESMA VERDE
Ricardo Monreal y el Paredón de la extorsión

Ocho y a veces más elementos de esta
delegación, realizan sus rondines diarios de soborno y extorsión, son las ratas
de alcantarilla en festin de botín que se inauguran en la pagana corrupción de
todos los días y salen a ronronear, a conquistar su territorio, pues se lo
acaban de ganar, a través de MORENA, en las pasadas elecciones.
Son esa bocanada de furia, que a mi
amigo de toda la vida, dicharachero, de cuerpo atlético y que se dice ser más
mandón que el Señor de los Cielos, la serie que repiten, puesto por puesto, en
sus televisores, los tiangueros, dejaron a punta de infarto y lágrimas, porque
en diez días le quitan toda su vida, no tiene el dinero.
“O pagas o te quitamos” … Aquí ya valió
madre tu puesto, le dijeron, sin 25 mil pesos, no hay permiso y la ley es para
todos, pero muchos ya pagaron, no te la vamos a perdonar, vete a robar, vete a
asaltar, pero los juntas.
Estaba cerca de él y pasé a saludarlo y
sus lágrimas, su cara agachada aceptando su próxima sentencia, fueron furia en
mí, fue dolor que me abrió toditas las heridas de este México que no acaba de
parir de la MORENA, cobardes, que solo quieren el poder para tener más ranchos,
más terrenos, más casas en Veracruz y Zacatecas.
Sólo dame tu bendición, ya no me
volverás a ver, estos días no he vendido y me están fiando la comida, me voy de
ilegal, a cruzar el desierto, no me importa si me mata la migra, la Mara
Salvatrucha o los polleros, pues no llevó dinero para su extorsión, pero me la
voy a jugar, pues en días ya no me puedo poner, mis 25 años de tianguero de San
Cosme terminan, asintió.
Y yo te pregunto Ricardo Monreal, ¿te
vas a atrever?...Ya he visto a las cuadrillas intimidando para el gran
operativo que vas a ordenar a los trabajadores de venta de ropa y todo tipo de
mercancías que son amables, que te dan el permiso del regateo, que tienen pocas
utilidades para pagar las escuelas de sus hijos, que salen a la lucha dura, con
sol, con lluvia, con tormenta, con
hambre, que son parte de ese México de casuchas, de los cuartuchos de vecindad
y de azotea y que te dicen: - Vamos, te invito a mi casa y he estado en sus
casas, sin boiler, sin estufa, y me han
preparado platillos deliciosos en su hornilla eléctrica y son tan entusiastas
cargando sus pesados “diablitos” llenos de su mercancía, mientras le rezan a su
santo favorito, San Judas Tadeo, que tengan venta y a cambio todo lo darán “
bara- bara”.
¿Te vas a atrever a golpear brutalmente
a padres y madres que trabajan de sol a sol para ganarse un dinerito, a esos
desprotegidos de la vida que no conocen México, porque nunca han viajado, que
sólo quieren sobrevivir y vender, mientras tú los enfilas hacia tu Paredón de
la extorsión?
Te vas a atrever?... Aún nos quedan
días, a muchos, para detener tu soberbia.
@RocíoSesma
soldesoles.blogspot.com
soldesoles20@hotmail.com
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