JOSE
LUIS CORONADO ALVARADO.
AYOTZINAPA
EN LOS OJOS DEL MUNDO.
Mas alla de lo que desde el gobierno federal quieren
hacerle creer a la sociedad tienen ante si la presión internacional y el repudio
popular por el asesinato de estudiantes normalistas de Ayotzinapa en Iguala
Guerrero, en donde a la fecha hay 43 desaparecidos y versiones que rayan en la
burla como el hecho de que los estudiantes hayan tenido nexos con el crimen organizado.
Estupefactos por el
crimen, sobrevino la condena internacional
con la solidaridad en la exigencia de justicia y castigo a los
culpables, de parte de las organizaciones de países participantes en la 8ª
Turma de Teoría Política Latinoamericana de la Escuela Nacional Florestán
Fernandes del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) de Brasil.
El pasado 26 de septiembre de 2014, en la ciudad de
Iguala, Guerrero fue perpetrada una masacre hacia los estudiantes de la Escuela
Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerrero y mientras se
encontraban realizando un boteo para solventar gastos de alimentación y
transporte durante sus prácticas docentes en diversos puntos de ese estado y
así como para asistir a la manifestación del 2 de octubre en la Ciudad de
México.
En esa jornada de movilización, los estudiantes
fueron agredidos por las autoridades municipales y estatales con balas; cuatro
compañeros resultaron asesinados por parte de la policía y de un comando armado
no identificado en tanto hay 43 desaparecidos.
Estos hechos solo evidencian la permanencia de un
Estado criminal en que la ilegalidad y el terror no son accidentales sino
estructurales en la trama de complicidades
y el status de corrupción de que adolece nuestro país.
De ahí la definición de la 8ª Turma de Teoría
Política Latinoamericana de la Escuela Nacional Florestan Fernandes del MST, de Brasil, al solidarizarse con el movimiento estudiantil en
México y manifestarse en contra de la violencia hacia los
movimientos sociales y estudiantiles, y la manipulación mediática del gobiernode
Guerrero a cargo de Ángel Aguirre.
A partir de ahí se incrementa el clamor del castigo
a los responsables intelectuales y materiales de la muerte extrajudicial de los
asesinados, la presentación con vida de los desaparecidos, la liberación de los
que aún se encuentran detenidos y que no se levanten averiguaciones previas ni
ordenes de aprehensión a los interrogados por el Ministerio Público, de ahí
el renovado grito de indignación:
¡Porque vivos se los llevaron, vivos los queremos!
¡Alto al terrorismo de Estado!
¡Alto a la criminalización de los movimientos
estudiantiles y sociales!
¡Solidaridad internacional, ni una muerte más!
Sin embargo como lo sabemos y lo hemos venido
padeciendo, la guerra mediática juega en el papel del Estado a ser el
distractor principal y baste con ver como Televisa, menciona que el asesinato de
estudiantes normalistas de Ayotzinapa fue obra del "crimen
organizado", en una burda mentira al hacerse cómplice de los verdaderos
asesinos.
Y vale decir
que Peña supo y fue coparticipe de esta represión
porque no se tomo una decisión de esa responsabilidad y de ese tamaño sin la
autorización del mismo presidente y también Angel Aguirre fue coactor de este
crimen miserable al igual que el PRD al
haberse sumado a la política neoliberal del gobierno federal de represión al
pueblo.
Esta represión no tiene precedentes y solo es comparable, por ser un crimen
masivo y alevoso, con la represión a los estudiantes el 2 de octubre de 1968.
La verdadera responsable de esta represión es la oligarquía (nacional y
extranjera) que ordena a su fieles lacayos
que repriman al pueblo para conservar sus privilegios.
Es evidente que en su desesperación por detener la lucha del pueblo en contra
de las reformas neoliberales, los tres niveles de gobierno decidieron realizar
la masacre de estudiantes de Ayotzinapa, para salvaguardar los intereses de la
oligarquía.
México esta de luto, el pueblo llora la masacre de sus hijos. Y cuando un
pueblo valiente llora, la injusticia tiembla, por ello esa larga marcha del
dolor e indignación del Ángel de la Independencia al Zócalo.
En este calvario de ofensas nada es normal, ni la impunidad con la que actúan
cuerpos policiacos y delincuenciales bajo un mismo "operativo", en la
decadencia de un Estado difuso, ni las
fosas con las que, no solo se ocultan cuerpos, sino también a victimarios,.
No es normal esta violenta resaca transexenal que Carlos Fazio llamó:
"brutalización de la política", con la que "proliferaron grupos
paramilitares y de limpieza social, derivados del terrorismo de Estado" y
de que se siga protegiendo a funcionarios estatales o del nivel federal y que
incluso nos hagamos la pregunta de: ¿Dónde quedo el mando policial único? ¡Le
faltaron tamaños o le sobró complicidad al gobierno de Peña para implementarlo
en ese combativo estado!
¿Y las Instituciones Procuradoras de
Justicia Mexicanas? ¡Acaso en la zozobra social,? ¿Y la población a quienes se niegan de manera pronta y expedita los
resultados periciales de las decenas de cuerpos ejecutados encontrados en las
cercanías del ensangrentado Iguala.
.El horror no debe paralizar a una sociedad ávida de
justicia, que grita y reclama por sus hijos asesinados, por los estudiantes desaparecidos, por las
mujeres sacrificadas y por los ciudadanos agredidos y por esta nueva y dolorosa
ofensa de gobiernos indolentes debe servir para saber que tipo de pueblo somos y que hacemos ante la
criminalización de la protesta social y del asesinato de nuestra juventud valiente y pujante de heroísmo,
además de que no hay que olvidar que el gobierno de Peña y su chafon Secretario de educación ya habían asestado un
golpe a la educación publica y ahora asesinan a quienes ya no serán reivindicadores
de las aspiraciones de la sociedad por la educación, al caer ultimados por las
balas asesinas en lo que muchos llaman crimen de lesa humanidad del gobierno
peñista.
Por ello, este 8 de octubre las calles
de la Patria se vistieron de luto, indignación
y rabia para exigir la presentación con vida de los estudiantes secuestrados; demandar justicia por los jóvenes asesinados
de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerrero y el
castigo a los responsables materiales e intelectuales.
Asi se congregaron el día de ayer en los mas importantes puntos del país,
organizaciones indígenas, campesinas, estudiantiles, sindicales, sociales y
populares sumados a las protestas para
detener la barbarie del gobierno contra los estudiantes, las mujeres y el
pueblo mexicano.
Y desde la megamarcha capitalina , mas allá de protagonismos personales o de
organizaciones marcharon a unísono la queja,, la protesta la indignación contra
un gobierno violador de derechos humanos y asesino de estudiantes normalistas,
siguiendo el tono de las organizaciones latinoamericanas y de Estados Unidos y
Suecia que lanzaron el reclamo y cuestionamiento al gobierno represor de Peña
cuya acción es repudiada desde Argentina hasta el Caribe y sectores importantes
del pueblo estadounidense en tanto los reclamos y manifestaciones se dieron
desde Baja California hasta Quintana Roo.
¿Seguirá igual de aguantador el pueblo mexicano?
¿Nosotros creemos que no?¿Usted que opina?
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