¿Navidad en puerta?
-Preparan nuevo golpe a la economía familiar.
-Mediante encuesta pretenden justificar aumento en tarifas.
-Como siempre, pulpos del transporte prometen modernidad.
ES CASI un hecho
que los concesionarios del trasporte urbano en Tamaulipas habrán de recibir su
regalo navideño-vía aumento de tarifas-aunque no precisamente en ese último mes
del año.
El nuevo revés que
el gobierno estatal prepara para los usuarios de ese necesario servicio de transportación
colectiva, tiene una nueva modalidad.
En efecto, para
maquillar la exigencia de los pulpos del transporte la Delegación Estatal
Tal misión trae a
su cargo el ingeniero GONZALO TREVIÑO ALANIS, Subdelegado de la Dirección Estatal
A juzgar por lo
manifestado por el Secretario de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (SEDUMA),
RENE SALINAS TREVIÑO, en lo que resta del mes de octubre o en el próximo
noviembre, se oficializará el incremento a las tarifas del transporte
colectivo.
La estrategia de
la encuesta previa lleva como objetivo sondear entre lo usuarios la medida del
aumento en el costo del boleto, de acuerdo al municipio en donde residen.
Obviamente, la
necesidad de los usuarios de trasladarse hacia o desde sus centros de trabajo, los
induce a aprobar el incremento a cambio de la eterna promesa de modernización
de las unidades de transporte colectivo.
Lógicamente, si a
un encuestado se le pregunta si está dispuesto a pagar más por ese servicio a
cambio de viajar en vehículos más modernos, la respuesta va a ser positiva.
Lo malo del caso
es que, quienes explotan esa actividad con la complicidad de la autoridad
estatal, siempre prometen modernizar la flotilla urbana y mejorar la atención
de los operadores a los pasajeros, pero, a final de cuentas, todo queda en eso:
en simple promesa.
Por lo pronto, el
matamorense egresado del Tecnológico de Matamoros tiene a su cargo la encuesta
previa que enmarcará el nuevo golpe a la ya de por sí deteriorada economía
familiar.
Aunque, eso sí, el
nuevo método para oficializar al abuso, prácticamente involucra al propio
usuario de ese necesario servicio urbano.
Argumentos pasados
se basaban en supuestos estudios socioeconómicos que, finalmente, daban la
razón a los permisionarios con la trillada cantaleta del incremento en los
precios de aceites, carburantes, neumáticos y refacciones.
Donde el pasado y
el presente se asemejan es que, en ambos tiempos, quienes regentean esa
productiva actividad afirman que cambiarán las viejas chatarras rodantes por
vehículos de modelo más reciente. También, que ahora sí cumplirán con la ley y
exigirán a sus operadores respeto pleno para los pasajeros.
La contaminación
que arrastra desde hace muchos años la autoridad estatal que regula el transporte
colectivo urbano, hace dudar de la buena intención de RENE SALINAS TREVIÑO y de
GONZALO TREVIÑO ALANIS.
Por cierto, el
tema no debiera circunscribirse a los pesos y centavos que trae consigo el
incremento a las tarifas. Del mismo modo, tampoco debe darse crédito total a
los concesionarios.
En cambio, en lo
que sí debería poner especial énfasis el gobierno del estado, es hacer cumplir
el reglamento vial y aniquilar la anarquía que surge como consecuencia de la
mala conducta de los choferes.
Aunque justo es mencionar que la ausencia de
agentes de tránsito o policías viales en las principales ciudades tamaulipecas,
es parte del desorden en ese contexto.
Además de la
modernidad que los usuarios exigen a cambio del costo mayor del servicio,
también se debe brindar la seguridad que el traslado implica.
Actualmente, para
nadie es desconocido que en Matamoros, por ejemplo, los operadores de las mal
llamadas peseras conducen a exceso de velocidad, suben y bajan pasaje en pleno
arroyo de calles y avenidas y, para colmo, no son nada amables con los
usuarios.
Difícil
encomienda, aunque no imposible, tienen en sus manos SALINAS TREVIÑO y TREVIÑO
ALANIS.
Y hasta la
próxima.
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