¿Se tambalea Jesús Mendoza?
Por Mario A. Díaz
POR supuesto que será por demás
interesante conocer si las distintas organizaciones sindicales cumplen con las
modificaciones a la Ley Federal
del Trabajo que obliga a la transparencia y rendición de cuentas.
De acuerdo a la nueva normatividad
oficial, los dirigentes obreros deben informar detalladamente acerca de los
recursos materiales y económicos que poseen, entre otras ordenanzas.
El enriquecimiento inexplicable o
explicable, según el cristal con que se observe, de muchos dirigentes de
trabajadores obligó a la adecuación de la Ley Federal.
En consecuencia, todos los sindicatos
del país deben trasparentar el manejo de los recursos provenientes del pago de
cuotas de los agremiados, así como los gastos de operación o expansión de sus
respectivos patrimonios materiales.
La información debe llegar en tiempo y
forma a la Secretaría
del Trabajo y Previsión Social y hacerse pública, por disposición oficial.
Quiérase o no, la atención está puesta
en las poderosas organizaciones que representan el Sindicato Petrolero y el
Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación.
Es de sobra conocido el brutal saqueo
de los recursos provenientes de las cuotas sindicales que han abultado las
cuentas bancarias personales de sus respectivos líderes.
La profesora ELBA ESTHER GORDILLO
MORALES y CARLOS ROMERO DESCHAMPS son el par de ejemplos que ilustran el caso.
Mientras la primera enfrenta un
proceso judicial privada de su libertad, el segundo es objeto andanada
mediática ante el descarado enriquecimiento y sus millonarios gastos personales
y de sus cercanos familiares.
En el plano doméstico, los reflectores
están puestos sobre el Sindicato Industrial de Trabajadores en Plantas Maquiladoras
de Matamoros (SITPMEM) que lidera JESUS MENDOZA REYES.
Las denuncias de sus propios
agremiados, aunadas al dispendio con que maneja su vida personal han colocado a
ese organismo sindical en la mira de la Secretaría del Trabajo.
Gastos onerosos en mujeres, autos,
joyas, restaurantes, prendas de vestir y cirugía estética se constituyen en
probable evidencia del mal manejo de los recursos económicos provenientes de
las cuotas que se les descuenten religiosamente, semana a semana, a los trabajadores
afiliados a ese sindicato.
En el entendido de que no solamente
ese rubro brinda a MENDOZA REYES la oportunidad de vivir una vida de dispendio.
También los amañados contratos colectivos permiten el soporte necesario para
sufragar los gastos que exige su tren de vida.
Basta recordar que el SITPMEM signa
contratos colectivos de trabajo con salarios de hambre que no superan, en la
mayoría de los casos, los 600 pesos por 48 horas de trabajo a la semana.
Respecto al cumplimiento de la nueva
disposición contemplada en la Ley Federal
del Trabajo, el Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Radio y la Televisión es un
ejemplo a seguir.
En efecto, su líder ROBERTO GUZMAN
REYES transparenta los recursos económicos y patrimoniales no tan sólo a la Secretaría del Trabajo
y Previsión Social sino a cada uno de los integrantes de esa agrupación
sindical.
Desde luego que otros sindicatos locales
cumplen con la disposición enviando sus informes a sus respectivas centrales y,
posteriormente, a la autoridad en la materia.
Como no hay mal que dure cien años ni
nadie que los aguante, como dice el dicho y dice bien, es muy probable que el
dirigente sindical JESUS MENDOZA REYES enfrente la justicia hacendaria y penal
como consecuencia de la explotación laboral a sus representados.
Arreglos de bajos salarios que
benefician a los patrones y cuotas sindicales producto del sudor de la frente
de los trabajadores son manejados a su antojo y para beneficio personal por el
líder obrero.
¿Cómo la ve?
Y hasta la próxima.
mariodiaz27@prodigy.net.mx
0 comentarios:
Publicar un comentario