H, Matamoros, Tamaulipas:

Neto Robinson


Tangente
Por Oscar Díaz Salazar 
Septiembre fue el mes seleccionado por el Secretario de Desarrollo Social de la administración municipal de Reynosa, Ernesto Robinson Terán, para reanudar la (pre) campaña de mediana intensidad - a medio brazo dirían los beisboleros – que ha desarrollado desde hace varios años con miras a convertirse en alcalde de Reynosa. 
Neto Robinson estaba destinado a ser una pieza fundamental en la política reynosense, en el sexenio en el que ejercería la gubernatura del estado el difunto Rodolfo Torre Cantú. Un amigo que colaboró en los últimos meses con el Doctor Torre, me confío que entre los planes que tenia para él, el candidato Rodolfo Torre, estaba la posibilidad de despachar en el palacio municipal, y que sus rivales en esta aspiración era un “compromiso” heredado de Eugenio Hernández, y Ernesto Robinson Terán. Sus críticos dicen que la mayor gracia, quizás la única – de Netito Robinson es que juega bien al golf. De acuerdo a estas versiones en un “green” consiguió la Secretaria Particular de la presidencia; en el hoyo 4 conquistó la Secretaría de desarrollo social con el Betico Valdez; en el club de golf del Cimarrón amarró el compromiso que lo regresó a la Sedesol municipal, y en el bar del “Campestre” se hizo de la Dirección administrativa de la Jurisdicción sanitaria.
Aunque algo hay de cierto en la versión de que como político y funcionario, Robinson Terán es buen golfista, también hay que considerar que Neto Robinson, como le llaman sus cuates, es miembro de una familia que se ha dedicado a la política por mucho años. Su Padre y su Madre han tenido varios puestos importantes y ambos han desempeñado  cargos de elección popular.  
Ernesto tenia la esperanza de ser postulado al cargo de diputado federal en la elección del pasado mes de julio. Contaba para sus aspiraciones con el respaldo del grupo político que hoy gobierna en Reynosa. Tal vez esa que era su principal fortaleza en ese momento, fue a la vez su mayor debilidad, pues la necesidad de equilibrar el reparto de espacios y oportunidades entre los diversos grupos que coexisten en el municipio, frustraron el deseo del titular de la Sedesol municipal de “probarse” en las urnas electorales.Estimo que la situación descrita anteriormente se va a repetir en los próximos meses, cuando se llegue el momento de definir al candidato a la presidencia municipal por el Partido Revolucionario Institucional. Se mira muy cuesta arriba que el priismo (entiéndase Egidio Torre… y quizás Peña Nieto) se decidan por un candidato surgido de la misma cantera, apadrinado por los mismos personajes, cuerpeado por el mismo grupo, y enemistado (por herencia) con los mismos individuos.Ernesto Robinson no la tiene fácil para hacerse de la candidatura frente a otros grupos priistas, y tal parece que a estas alturas del trienio (mocho) ya no la tiene segura ni siquiera al interior de su grupo. El “placeo” de varios jóvenes que colaboran, son amigos y contemporáneos del alcalde, que son una década mas jóvenes que Robinson Terán, son indicios de que la “jugada” del presidente ya no es la misma que la de su primo lejano… por cierto que literalmente es cada vez mas lejano.  Falta de colmillo, falta de seriedad, escaso talento, pocas luces, falta de hambre de poder, falto de compromiso, poca visión, poco empeño, son algunas de las opiniones que he escuchado para explicar el por que Neto “no despega”.

Veremos muy pronto si en esta ocasión se le hace al ya no tan joven Ernesto Robinson Terán.


Reynosa, Tamaulipas a 11 de septiembre de 2012
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Editores periodico frontera