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*-El caso del empresario de Ciudad Juárez.
*-En nuestro país la
corrupción a todo galope.
*-Verdadero basurero en el parque Periférico.
Por Federico Castillo García
En la colaboración de ayer martes comentamos sobre las
declaraciones hechas ante representantes de la ONU por el presidente FELIPE
CALDERON, en relación a la revisión sobre las estrategias de su gobierno en la
batalla que aún libra en contra del narcotráfico y de la delincuencia
organizada, donde afirmara que éstas son eficaces por lo cual son las más
adecuadas.
Ello a pesar de que el gobierno colombiano asegurara días
antes que en el combate al narcotráfico y al crimen organizado en México, iría
perdiendo éste último “por el sacrificio inútil de tantos seres humanos”. Y
efectivamente: ¿para qué tanto muerto si a fin y al cabo a más de cinco años de
iniciada esta estúpida guerra, la violencia y la inseguridad lejos de disminuir
parece que va en aumento.
Y también, como si fuese uno de los caballos del
Apocalipsis, la corrupción en nuestro país aumenta desmesuradamente y para
ejemplificar esto último hemos de narrar un trágico caso más de los muchos que
han ocurrido en ciudad Juárez, Chihuahua, y en los cuales finalmente las
víctimas resultan ser inocentes y que por el valor civil que han mostrado antes
de sus sacrificios, merecen ser imitados. Niños, mujeres, (activistas
sociales), ancianos, etcétera.
Se trata del asesinato del empresario juarense, ELIGIO
IBARRA AMADOR, quien al momento de ser asesinado contaba con 65 años de edad y
desde siempre vivió en dicha ciudad fronteriza del norte del país junto con su
familia, hasta que obligado por las circunstancias, decidió cambiar su
residencia al lado americano, a El Paso, Texas.
El día 17 de septiembre del año pasado, un comandante y
nueve agentes de la Policía Federal Preventiva (PFP), que se encontraban a su
mando, irrumpieron en el negocio de venta de refacciones automotrices que
IBARRA AMADOR tenía en ciudad Juárez, para con lujo de violencia sacarlo y
privarlo de su libertad con la amenaza de que si no les daba dinero, le
“sembrarían” armas y droga. En esa ocasión don ELIGIO les dio 3 mil dólares con
el “ofrecimiento” de que posteriormente les daría más.
Posiblemente los corruptos servidores públicos, es decir, el
comandante y los nueve agentes federales, le encontraron “sabor al caldo” y por
segunda ocasión fueron por su víctima a quien en ahora le exigían la cantidad
de 5 mil dólares “o de lo contrario te cargaremos con droga y armas”.
ELIGIO IBARRA, para cuidar la vida de su familia y la propia
cambia su residencia a El Paso, frontera con ciudad Juárez, por lo cual decide
interponer una denuncia en contra de sus victimarios ante el ministerio público
del fuero común y al no actuar éste con la premura o urgencia que ameritaba el
caso, opta por recurrir a la Procuraduría General de la República, instancia
ante la cual de igual manera presenta la denuncia correspondiente en contra de
los agentes policíacos federales.
Sobraría preguntar aquí cuáles fueron las razones por las
cuales don ELIGIO prefirió irse directamente a la PGR al ver que la fiscalía
del fuero común ante la cual inicialmente interpuso la denuncia en ciudad
Juárez, porque más adelante usted mismo, amable lector, se preguntará hasta
dónde llegan los tentáculos de la madre de todos los vicios como es la
corrupción.
Cuando la PGR recibe la denuncia, una fiscal federal cuyo
nombre se ha omitido por obvias razones, decide darle seguimiento a la misma
para lo cual posteriormente se monta un operativo y es en el segundo “levantón”
que los policías federales que le exigían 5 mil dólares cuando éstos son
detenidos en total flagrancia. El comandante y sus nueve agentes fueron
detenidos por agentes también federales en los momentos en que en un vehículo
oficial trasladaban a “un desconocido”, señala el reporte oficial de la propia
PGR.
Desde luego que “el desconocido” era don ELIGIO.
Pues bien, el día de ayer martes este valiente empresario
habría de comparecer ante el ministerio público del fuero federal. Sin embargo,
manos criminales lo esperaron a que cruzara al lado mexicano para otra vez
secuestrarlo pero ahora para asesinarlo a puñaladas y posteriormente bañarlo
con gasolina y prenderle fuego afuera de su casa en ciudad Juárez, a donde
habría llegado antes de presentarse a declarar y ratificar su denuncia.
Desde luego que la pregunta sería: ¿quién o quiénes fueron
los que lo mataron y porqué razón?
La respuesta lógica sería en todo caso, “fueron los jefes
superiores de los agentes federales involucrados y encarcelados en espera de
una resolución penal para, después de evitar la audiencia en la cual la víctima
ratificaría la denuncia correspondiente, lograr la libertad de los primeros y
posiblemente absolverlos de toda culpa e incluso hasta revertir la situación,
hacerlos víctimas y hasta, ¿porqué no?, rendirles reconocimiento a su labor
como servidores públicos federales.
Sin embargo, aquí en lo personal, conjeturo que tal vez y
ante la magnitud del abuso cometido por esos corruptos policías federales en
una ciudad violenta e insegura como es Juárez, Chihuahua, el asesinato del don
ELIGIO pudo haber sido ordenado por mandos de mucho mayor peso con tal de no
desvirtuar o desprestigiar esa guerra “intensa” que el gobierno del presidente
CALDERON continúa en contra del narcotráfico y la delincuencia organizada.
Como el trágico caso del empresario chihuahuense, existen
muchos más y éstos se han ido multiplicando “casualmente” desde que iniciara la
guerra del presidente CALDERON, quien el sábado pasado declarara que “los
grupos de la delincuencia organizada ya realizan actividades propias del Estado
mexicano”, en una clara prueba de que lejos de que “le vamos ganando la guerra
al narco” éste parece que ni cosquillas siente y que más de preocuparse por las
fuerzas armadas (Armada, Ejército Mexicano y PFP), se ocupan más por combatirse
entre ellos mismos al defender sus territorios y disputarse otros.
Y el gobierno de los Estados Unidos…Bien gracias.
Pasemos a otros temas para comentar la queja que algunas
familias nos hicieran llegar en días pasados en el sentido de que en la rotonda
o parque “Periférico” no hay suficientes recipientes o contenedores depositar
la basura que se genera específicamente los fines de semana cuando a esa lugar
acude un considerable número de familias. Los lunes el interior de dicha
rotonda amanece tapizada de todo tipo de desechos sólidos como son plásticos
(pet), vasos y platos de unicel y otros muchos desperdicios. No sabemos si la
tarea corresponde a Limpieza Pública o a Parques y Jardines por lo cual se lo
dejamos de tarea. Atendida la petición de las quejosas, habremos de enviarle
por ese motivo un mensaje a la Dirección de Concertación Social en virtud de
que la generación de esa basura es precisamente por los permisos que esa
dependencia concede, previo cobro de cuotas, a los comerciantes que cada fin de
semana acuden de igual manera para comercializar sus productos. ********HASTA
LA PROXIMA
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