H, Matamoros, Tamaulipas:

¿Rueda de la fortuna?


PALACIO JUEVES 1 DE MARZO…
por: Mario Diaz 

    DICEN y dicen bien que la política es como la rueda de la fortuna. Algunas veces arriba y algunas otras, abajo.
    Lo anterior viene a colación por el promisorio horizonte en el mundo de las decisiones políticas de dos personajes tamaulipecos, aunque, eso sí, de extracción partidista antagónica.
   Uno de ellos, el matamorense SIMON VILLAR MARTINEZ y, el otro, el reynosense FRANCISCO JAVIER GARCIA CABEZA DE VACA.
     El primero, prácticamente fue exiliado de la entidad por el entonces gobernante TOMAS YARRINGTON RUVALCABA, por asuntos de corte meramente personal, según cuentan muy en lo privado gentes que mantienen relación cercana con ambos.
    El segundo, durante su gestión como presidente municipal de la petrolera ciudad Reynosa fue sometido a intenso bombardeo mediático y auditorías por el exmandatario estatal EUGENIO HERNANDEZ FLORES, en un fallido intento por aniquilarlo políticamente.
    Actualmente, ambos, SIMON VILLAR y CABEZA DE VACA ocupan lugares privilegiados en el firmamento político nacional en la víspera del relevo de los poderes constitucionales.
    En cambio, sus respectivos detractores, TOMAS y EUGENIO, enfrentan la metralla que, desde Los Pinos, vomitan las baterías del panismo y el calderonismo con la única intención de impedir una nueva alternancia en el país con el PRI como protagonista principal.
     Al igual que el candidato tricolor al senado de la república, MANUEL CAVAZOS LERMA, YARRINGTON RUVALCABA y HERNANDEZ FLORES son presuntamente investigados por malversación del erario en México y lavado de dinero en los Estados Unidos.
     En situaciones totalmente opuestas, SIMON VILLAR MARTINEZ, actualmente funcionario estatal en el estado de México, se perfila como integrante cercano al círculo de ENRIQUE PEÑA NIETO, mientras que FRANCISCO JAVIER GARCIA CABEZA DE VACA se prepara para ocupar un escaño en la Cámara Alta del Congreso de la Unión, merced de su primera posición en la fórmula panista en Tamaulipas.
    Es decir, quienes resintieron los efectos del poder gubernamental en sus respectivos momentos, ahora se preparan para enfrentar nuevos retos en las grandes ligas de la política mexicana.
     En cambio, la suerte de TOMAS y EUGENIO, incluyendo la del propio MANUEL CAVAZOS, no es del todo clara a medida que se acerca el proceso electoral federal, que se antoja como uno de los más importantes y reñidos en la historia política contemporánea azteca.
    Horizonte que se ennegrece ante el avance que presenta el posicionamiento de JOSEFINA VAZQUEZ MOTA y el descenso, por mínimo que sea, en la puntuación del todavía puntero en el hándicap presidencial, ENRIQUE PEÑA NIETO.
     Al margen de los 4 puntos, que en opinión del presidente de la república FELIPE CALDERON HINOJOSA son la distancia entre JOSEFINA y ENRIQUE, lo cierto es que la candidata panista mejora sus momios en la carrera que tiene como meta la residencia oficial de Los Pinos.
    Lo anterior, dejando a un lado si tiene o no la capacidad e inteligencia suficientes como para llevar la rienda política, económica y social del Estado mexicano, o si el priísta es la mejor carta para regresar la paz y certidumbre social a todos los rincones de la república.
    
DESDE EL BALCON:
   Vaya que sí le ha dolido al diputado federal BALTAZAR HINOJOSA OCHOA el descrédito del presidente FELIPE CALDERON HINOJOSA con relación a la reforma constitucional que establece la educación media superior como obligatoria y gratuita.
    El legislador matamorense jura y perjura que la iniciativa fue creada y presentada por él en base a un estudio concienzudo y convencimiento partidista. Sin embargo, para el Jefe del Ejecutivo Estatal, como es del dominio público, la medalla corresponde a una exdiputada entonces perredista.
    El caso es que HINOJOSA OCHOA, a través de desayunos, entrevistas y desplegados periodísticos pretende convencer a sus representados del IV Distrito Electoral, infructuosamente, por cierto, de su supuesto o real trabajo político.
   Ni hablar.
   Y hasta la próxima.

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Editores periodico frontera

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