“Las mulas de siempre”

Vórtice

Por Martín Jaramillo Luna

 En Silao  de la Victoria Guanajuato, en mis años de juventud, había un bar que se llamaba “Las Mulas de Siempre”, ese lugar estaba en pleno centro de la ciudad, y al preguntar en alguna ocasión a su dueño, el porqué del nombre tan poco común, este me contestó que por que a ese lugar siempre asistían los mismos parroquianos, “siempre los mismos, tal vez en distinta mesa y con distinto compañeros de parranda, pero siempre los mismos parroquianos, de ahí el sugestivo nombre.

Lo anterior llegó a mi recuerdo al leer la lista de aspirantes a diputados y senadores por el principio de representación proporcional ( plurinominales) postulados por el Partido Revolucionario Institucional, nombres harto conocidos tanto en el ámbito nacional como en todos y cada uno de sus estados, conocidos no por el trabajo en favor de su pueblo, sino por su constante vivir del presupuesto legislativo.

Lo mismo un Panchito Arroyo Vieyra por Guanajuato, que una Amira, Gómez Tueme por Tamaulipas, o Manglio Favio Beltrones en Sonora, Murillo Karam en Hidalgo y así sucesivamente, muchos personajes que han hecho de las curules su forma de vida, su modus vivendi.

Háchele usted un ojo a los iluestres tamaulipecos que figuran en las listas de candidatos tanto al senado como a las diputaciones pluri, Amira Gómez Tueme, Marco Antonio Bernal, Carlos Romero Deschamps, Guadalupe Flores Valdez y Elsa Patricia Araujo de la Torre, puros apellidos bien conocidos en Tamaulipas.

La lista es larga, muy larga, pero no dejan de ser los mismos que siempre han medrado con la política, los mismos que siempre han buscado vivir del aparente servir al pueblo, aquellos que sexenio tras sexenio brincan de una cámara a otra y que conocen hasta con los ojos cerrados los pasillos de las cámara de diputados y de senadores.

Pero en la lista llama la atención la incursión de Guadalupe Anastasia Flores Valdez, en el lugar número 12 de la lista de candidatos al senado, y llama la atención por la posición en la que está de la lista, pues si el PRI sintiera que va a ganar de todas, todas, tendría razón de ser el ponerla en ese lugar, pero ¿ será que se está preparando para otra derrota histórica?

En ese contexto se entiende que el PRI quiera a Guadalupe Flores, en el senado y no a Cavazos Lerma, quién al parecer está más preocupado por su futuro judicial que por el político, ya que el abismo electoral está a sus pies.

Cavazos Lerma no representa nada, mi electoral ni políticamente, pues es un político acabado, por sus excesos como mandatario y porque ya lo engaña el subconsciente, en su visita a esta urbe cañera fue como ver a uno de los sobrevivientes de la era paleozoica del PRI, por ello tantas fotografías, pues todo mundo quería sacarse una foto con él antes de que fuera procesado por el gobierno federal.

Total  lo de Cavazos no tiene remedio, y lo de la lista del PRI tampoco, por que se parecen tanto a aquel bar en Silao que se llamaba “Las mulas de siempre”.

Hasta la próxima 

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Editores periodico frontera