Tangente
Por Oscar Díaz Salazar
Reynosa, Tamaulipas a 16 de enero de 2012
¿Le perdonaran los agravios los editores del periódico matutino de Reynosa? ¿Se olvidaran del tiempo en el que el patriarca del clan se vio en la necesidad de radicar en los Estados Unidos como medida precautoria ante el riesgo de perder la libertad?¿Serán capaces de olvidar los líderes de la Federación de Trabajadores de Reynosa, que Manuel Cavazos fue uno de los ejecutores más eficientes de la política anti obrerista del entonces presidente Carlos Salinas?
¿Pesara mas el pragmatismo de los Cárdenas González, que la rivalidad añeja que les une (o separa) del economista matamorense, a la hora de definir la actuación de uno de los grupos políticos más fuertes del estado de Tamaulipas, en la campaña que tendrá su momento culminante en la elección federal del próximo julio?
¿Albergaran aun rencores los colaboradores de Américo Villarreal Guerra, ninguneado y desplazado en el ejercicio del poder cuando aun le restaban 2 años a su sexenio?
¿Habrá superado, la editora Ninfa Deandar de Nuevo Laredo, la animadversión que le tuvo al ex gobernador y a su favorita, la muchachita (en ese tiempo) a la que confió el gobierno municipal de la capital mexicana del comercio exterior?
¿Olvidarían los cetemistas neolaredenses los agravios que a su organización y a la persona de Pedro Pérez Ibarra, hizo el señor del sombrero?
¿Cuánto daño es capaz de causar a Manuel Cavazos Lerma, el ex alcalde de Altamira Juan Genaro de la Portilla, de quien se dice consiguió un pase al Penal de Andonegui, por haberle puesto un travestí como pareja de baile al ex senador Cavazos?
¿Volverán a darle la espalda al PRI, los electores de la capital tamaulipeca, como ya lo hicieron en una ocasión para castigar a un Gobernador (MCL) que les regateó a los victorenses chambas, contratos y privilegios?
¿Podrá conseguir una buena votación el ex gobernador esotérico, en el municipio de Río Bravo, donde se cuentan por centenas las anécdotas de agravios a Juan Antonio Guajardo, hermano del actual presidente municipal panista, y también a los integrantes del clan árabe, hoy por hoy representados por el diputado federal Edgar Melhem?
¿Lograra obtener el perdón de los Garza Cantú, una de las familias más poderosas de Tamaulipas, en la que no olvidan los agravios que representó le derrota de Álvaro en su intento por ser Alcalde de Tampico, ni los maltratos a Rigoberto, tanto en su campaña para llegar a la alcaldía de Reynosa, como en el ejercicio del poder?
¿Olvidaran el mal trato que tuvieron con Manuel Cavazos Lerma los editores del estado, en especial a los que no solo les negó un pago, también les envió auditores y les buscó el modo de perjudicarlos?
¿Serán capaces de perdonar al señor de las pirámides los miembros de la clase política que tuvieron que esperar seis años para poder participar en las tareas partidistas y en la administración pública, para ocupar los espacios que durante un sexenio les fueron vedados, pues estuvieron reservados para los muchachitos y muchachitas que inventó (reclutó para efectos políticos) el señor del sombrero?
0 comentarios:
Publicar un comentario