Por Dora Ma. Morales
Sin lugar a dudas, este ha sido un mal año para los ganaderos, debido
a que por la ausencia de lluvias se han visto obligados a invertir más dinero
para alimentar los animales”, asegura
El exdirigente campesino dijo que el sector social se ha visto más afectado
por la sequía de varios meses y el intenso calor, que ha acabado con los
pastizales y no cuenta con la infraestructura suficiente para almacenar agua en
represas o bien, perforar pozos que abastezcan del líquido en tiempos de seca.
Agregó que la esperanza que tenían era que en este mes les cayeran algunas
precipitaciones, pero no ha sido así, dice; “no tenemos conocimiento de que se
hayan muerto reses pero sí ha habido decesos en el ganado menor, sobre todo en
las crías de cabritos y borregos”.
En lo que respecta a los ganaderos del sector social, dijo que
lamentablemente la falta de recursos es lo que los pone en un predicamento.
“Tenemos información de algunos compañeros que se han visto forzados a
malbaratar sus animalitos porque no tienen dinero para comprar forraje y
acarrear agua”, agregó, y mencionó que los animales han estado perdiendo peso,
debido a la sequía por la que se atraviesa en esta parte del estado.
Pero habla de que además de la falta de infraestructura para guardar
forraje y contar con pozos surtidores de agua, otro factor que los afecta es
que hay zonas en este municipio en donde con sólo escarbar unos metros, el
recurso que se obtiene es salino, por lo que no lo pueden consumir los
animales.
Pero la sequía es lo que más les ha afectado durante este año, “porque con
la baja de peso de los animales, no se pueden comercializar a los precios
normales porque el comprador siempre tendrá argumentos para pagarnos menos”,
agregó Uriegas del Valle.
La única esperanza que tienen por ahora es que pronto se registren algunas
lluvias que permitan fortalecer las áreas de pastizales y se pueda captar algo
de agua para mitigar el hambre y la sed de los animales.
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